miércoles, 27 de junio de 2012

Capitulo 1. - These Four Walss


These Four Walls




El taxi se detuvo en seco, logrando que mi cuerpo se balanceara hacia delante, frente a una casa de gran tamaño. Siendo de noche, no me era fácil admirarla por completo, no más de los faroles alumbrados cerca de ella.


-Es aquí. Interrumpió mis pensamientos el hombre que conducía el auto.
-Gracias. -Susurré y busqué en mi bolso de mano el dinero que debía por el viaje.

En un rotundo silencio le entregué el dinero en la áspera mano y bajé acompañada de mi equipaje. Cerré la puerta con cuidado y en menos de dos segundos el auto arrancó a gran velocidad.

Me quedé solitaria en medio de la oscura noche, aún en la vereda frente a la casa y el nerviosismo que recorría por mis venas comenzaba a hacerse más presente en cada segundo que transcurría.

Suspiré y me aventuré a dar el primer paso y así comenzar mi marcha hacia el rectángulo de madera que pronto alguien abriría para recibir mi inesperada visita.
Insegura levanté mi puño cerrado y sin arrebato toqué tres veces.

Esperé alrededor de cinco minutos y al ver que nadie salía a mi encuentro busqué otro método. Mis ojos buscaron alguna herramienta que me pudiera ayudar a llamar la atención de quienes habitaban la casa. Finalmente encontré algo parecido a un botón pegado en uno de los bordes de la puerta, el timbre. Toqué este luego de haberlo pensado alrededor de diez veces, tampoco quería molestar.


Ahora culpaba a mi madre por haber elegido un vuelo retrasado.
Seguí esperando y noté que una de las ventanas, en el segundo piso se encendía, fue cuando los nervios que me comían
ya me mataban. Oí pesados pasos y luego miré la manilla, esta comenzaba a girar en cámara lenta.

Pensé que la abrirían por completo, pero para mi sorpresa la mitad de un rostro salió a mi bienvenida.

-¿Si? Se escuchó una pasiva voz desde el otro lado.

Me quedé en silencio ¿Si? no era una pregunta, a menos que contestes tu teléfono celular.

-¿Quién está ahí? Pregunté jugando con mis manos producto al nerviosismo.

Como lo esperaba, la puerta se abrió un poco más, si, solo un poco. Con eso, apareció un muchacho de pelo desordenado, sus ojos estaban algo entrecerrados, lo que decía que dormía, qué por cierto al ver a una chica en medio de la noche estos se abrieron para analizar mi rostro, labios adormecidos, polera blanca ajustada y nada más que unos bóxers, pies descalzos.

-¿Quién es? Quería una respuesta, no otra pregunta.

-No has respondido mi pregunta. Me animé a sonreír, solo para transmitirle un poco de confianza, aunque sé que es difícil brindar confianza a un completo extraño.

Finalmente dejó su imagen a mi completa vista, supuse que comprendió que no era nada peligroso, solo una adolescente llamando a su puerta a las dos de la madrugada.

Me miró confuso, parecía estar tratando de recordar a alguien a quien sé que había olvidado. Hablé al ver que no pronunciaría ni una sola palabra.

-Mi madre tuvo una emergencia, voló a Europa y no tengo familia en Seattle, ni tampoco el número de tu familia, lo perdimos cuando nos marchamos, es la razón de mi visita sin aviso. Fue una explicación corta y precisa.


-¿De qué hablas? Suenas como si nos conociéramos. Aún confuso y examinándome con la mirada.-Y aún no respondes mi pregunta. –Suspiré.

-Soy John, John Bloom-Me estiró su brazo y su mano la extendió para seguramente estrecharla con la mía

Miren como ha crecido. Sin esperarlo y sin quererlo, mis ojos se humedecieron al tener nuevamente frente a mí a una de las personas que más he querido y solo eso, pues somos primos.

-No me vas a recordar ¿Verdad? Estreché nuestras manos y oculté mis ojos húmedos agachando el rostro.

-¿Reconocer?... Alto, ahora te toca responder mi otra pregunta.

-Nayeli Meyer. Pronuncié con firmeza y aún así me sentía quebrada por dentro.
No iba a decirle mi segundo apellido, pues lo compartíamos.

-¿Nos conocemos? Sonó incómodo.

-Dudo que lo recuerdes John. Esbocé una sonrisa sin ánimos.

-¿Quieres pasar? Preguntó haciéndome espacio para incorporarme en su hogar.
-Gracias. Musité y entré.

Fue gentil, me ayudó con el pesado equipaje.

-Toma asiento Lo escuché entre la oscuridad, al poco rato se prendió la luz.

Sin decir nada me senté en uno de los cómodos sillones de cuero negro. Él me imitó, solo que en uno del frente, mejor, así podría mirarme y confeccionar el pasado.


[...]


Prometo ya no tenerlas tan abandonadas $:

domingo, 17 de junio de 2012

;advance.

El taxi se detuvo en seco, logrando que mi cuerpo se balanceara hacia delante, frente a una casa de gran tamaño. Siendo de noche, no me era fácil admirarla por completo, no más de los faroles alumbrados cerca de ella.

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-¿Si? -Se escuchó una pasiva voz desde el otro lado.
Me quedé en silencio
¿Si? no era una pregunta, a menos que contestes tu teléfono celular.-¿Quién está ahí? -Pregunté jugando con mis manos producto al nerviosismo.
Como lo esperaba, la puerta se abrió un poco más, si, solo un poco. Con eso, apareció un muchacho…

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-¿De qué hablas? Suenas como si nos conociéramos. Aún confuso y examinándome con la mirada.-Y aún no respondes mi pregunta. -Suspiré.

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El chico estuvo bastante rato observándome y a menudo se pasaba las manos por su cabello, pero pude notar su expresión de consternación al no lograr recordarme.

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-Enserio, puedo quedarme sola, supongo que no me pasara nada, de hecho creo que es más peligroso quedarme contigo -pude notar el tierno rubor en sus mejillas y solté una pequeña risita- era una broma.
-Este, es mejor que suba -dijo nervioso- buenas noches.

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Debo admitirlo, por más que sea mi primo está muy distinto, bueno sabia que estaría diferente, pero no era como me lo imaginaba, es perfecto…

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-George… -Susurré- y eso! -mis pulmones comenzaban a sufrir. Causa: un gran reencuentro.
Al parecer notó mi rostro en un tono azul, pues me soltó, y tomó mi rostro para verme a los ojos.
-Lo siento -Esbozó esa sonrisa que extrañaba ver- Nayeli, esto es… Vaya, te he extrañado tanto ¿Cuándo llegaste? -Se sentó en la cama y pronto la palpó, seguramente en señal de que me sentara a su lado y así charlar un poco.

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-¿Cómo les fue?-me preguntó.-¿Ah?... Digo, bien. Conocí a un amigo de George -sonreí y tomé asiento en uno de los cómodos asientos.-¿Cuál de todos?- Richard.

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Pensé que ya era hora de prestarle atención a lo que su perfecta novia hablaba, pero cada vez se tornaba más complicado. Siempre que levantaba mi rostro para poder apreciar a cada uno de los integrantes que compartía en la mesa, me encontraba con la constante y profunda mirada de mi primo. John.

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Miré el suelo y sonreí. Si solo él supiera que lograría hacerlo con un acto tan simple como sentir sus rojos labios sobre los míos. Bueno, no tan simple.
-Entonces ¿Es un sí? -Me parece que le gustaba hacerme sentir mal.
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These Four Walls

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¿Qué les parece la idea de Los Beatles como hermanos… de Sangre? ; Bueno, ese es el punto clave en The Four Walls. ¿En un fic todo se puede no?

The Onle Hope For Me Is You; http://theonlyhopemcrfanfic.blogspot.mx/

Capitulo 20. - Final.


Sentí incomodidad por varios minutos, estaba agotada, más que cansada, pero aún así no era capaz de conciliar al sueño.
Oh Susurré lo lo había olvidado Acaricié su mejilla.

De hecho, no estamos cansados solo es algo mental, pronto te acostumbraras, los primeros días serán difíciles Se acercó hasta besar mi frente.
Sonreí algo desanimada, desde ahora en adelante mi vida no sería normal, ni la rutina sería la misma.
Nos metimos bajo las sábanas y nos quedamos abrazados.
Pasaron los minutos, quizás horas
y aún así seguíamos desnudos bajo las sábanas.

Será mejor que me vaya, un asesor podría venir Susurró acariciando mi espalda.

Levanté mi rostro y lo observé. Sabía que sus facciones, cada gesto de su cara eran perfectos, pero nunca había contemplado lo maravilloso, espectacular... que era. Me observaba con dulzura y sonrió al ver mi cara de frustración al saber que se marcharía.
¿Quieres irte? Sonreí y acaricié sus hombros.

No, claro que no Besó mi frente Pero sabes que no sería buena idea que nos vieran en estas circunstancias Risoteó.
Suspiré y volví a acomodarme en su pecho.

Solo unos minutos más Susurré cerrando los ojos mientras el perfume esparcido por su tersa piel me drogaba.
Luego de un pequeño tiempo transcurrido, me encontraba ya vestida y parada esperando que James saliera del baño.

Listo Apareció cuando menos me lo esperaba ¿Estoy arreglado? ¿Se nota que acabo de tener relaciones con mi novia? Sonrió seductor.
Mordí mi labio inferir y me acerqué para cruzar mis brazos detrás de su cuello y besar sus labios pausadamente.

Estás perfecto Sonreí a pocos centímetros de sus labios y no me tientes, que te quitaría toda esa ropa tan bien ordenada en un par de segundos.
Ambos reímos, sus manos en mi cintura hicieron presión hacia su cuerpo y así poder besarnos con mayor comodidad.
Estaba disfrutando tanto el beso como sus suaves caricias bajo la polera ajustada, pero de un momento a otro las preocupaciones de la Nueva vida que tenía que tomar, aparecieron.
Paul Me alejé tan solo un poco y lo miré preocupada.

¿Si? Sonrió.
¿Qué es exactamente lo que sentiré al estar sentada junto a una persona normal? Dejé que mis brazos cayeran a mis costados-

Quizás Ansiedad, puede que tus sentidos se descontrolen, aprenderás a manejarlo, no te preocupes Habló con naturalidad ¿Acaso no entendía que al fin y al cabo, este tema me daba miedo?
James, no hables como si esto fuese algo normal ¡Necesito saberlo todo! Aún sigo asustada y no lo malinterpretes Es que no quiero ser una asesina Agaché el rostro y cerré los ojos, tenía ganas de llorar. Era impotencia.

No contestó, acompañó mi silencio haciendo del momento algo tenso.
Te entiendo Susurró es exactamente lo que sentía yo a un principio Los animales nos servirían ¿No? Ok, no era el tipo de respuesta que esperaba.

Levanté la vista y lo miré a los ojos Aparentemente ahora mis gustos habían cambiado y mi menú principal sería ese líquido del cual están hechos los seres vivos.
Te sonará extraño asqueroso Rió Pero no hay nada más en estos momentos que llame más tu atención.

Apreté los ojos y lo abracé por la cintura, quería sentirme protegida en sus brazos.
Pronto me encontré en medio de mi cuarto acompañada de la soledad, Paul se había marchado.
Los nervios de no saber cómo reaccionar frente a una persona, comenzaban a surgir. Me era espantoso dar por hecho que en cualquier momento tendría la necesidad de beber la sangre de una persona. Tenía miedo.
Me quedé la mayoría de la noche con los ojos pegados en la televisión, se sentía extraño no carecer del sueño, fue por lo mismo que estuve con los dedos tecleando mil palabras en el celular. James y yo teníamos que encontrar alguna manera de comunicarnos de noche.


 

Mañana no quiero que te alejes de mi Paul.
Ni aunque quisiera podría. Haha Enviar.
Te amo. ¿Sabías? Paul.
Incluso hasta por mensaje de texto sonaba encantador.
También te amo Enviar.

 
Y así fue durante toda la noche.

Ya era de día, estaba arreglada y perfecta para salir a clases. Salí algo retrasada, había esperado a que la mayoría de las personas ya hubiesen desaparecido de cada pasillo.

Al salir del edificio me encontré con James y su mochila al hombro.
Hola Sonrió y se acercó para besar mis labios con ternura.

Entrelazó los dedos se sus manos con los míos y comenzamos a caminar.

¿Y qué tal tu primera noche como inmortal? Sonrió.
Que pregunta más incómoda.

Extraña. Se podría decir que genial, siempre quise estar una noche completa en desvelo Reí nerviosa.
Llegamos al edificio de clases y la temperatura que sentía comenzaba a subir.

Dios, hace calor Murmuré algo agitada.
No. No tienes calor, es la sangre de las personas lo que llama tu atención y sientes esa sensación, pero tranquila, no sucederá nada. Sonrió llenándome de confianza.

Sujeté fuerte la mano de mi novio y caminé con nervios por los pasillos.

No sé si las cosas saldrán bien desde ahora en adelante, lo único que sé, es que siendo fuerte y sujetando de su mano las cosas podrían llegar a ser perfectas.

Fin.
okay, quite la imagen de Paul como "vegetariano" $: ahm, perdon por tener el blog abandonado(?) ; en fin, Se termino! :')  haha, subire el adelanto del nuevo Fic. Y ahm; asdfgh estoy emocionada con todo lo que hemos hecho en Here Comes The Summer.


Abrí mis ojos de inmediato y se acomodó a mi lado para poder mirarme.